El Cazador y El jilguero

Un cazador cogió un jilguero, que preso entre sus manos le dijo: "si yo hubiese visto tu traición y engaño, no hubieses logrado atraparme", a lo que el cazador le respondió: "De esta forma pillo a los descuidados que no se percatan de mis engaños".






Moraleja:




No vivas desprevenido, y se cauto con las personas mal intencionadas así evitaremos caer en sus redes.






Fuente: Fábulas Completas de Esopo